Hablar de una Vida Libre de Violencia implica el derecho que tenemos todas las mujeres, adolescentes y niñas a que ninguna acción u omisión sustentada en el género, nos cause daño de tipo psicológico, físico, económico, patrimonial, espiritual, sexual o, incluso, amenazante hacia nuestra propia vida.
Nuestra Integridad Psicológica es parte fundamental del ejercicio de una vida libre de violencia, lo que implica que, como mujeres, tenemos el derecho a que se respete nuestra vida, integridad física y moral, así como nuestra libertad en un ambiente inclusivo y libre de discriminación, sin que seamos educadas y valoradas bajo patrones estereotipados.
Algunas señales de Violencia por Razón de Género hacia las mujeres, son: todas aquellas conductas por parte de tu pareja o ex pareja o cualquier otra persona tendiente a desvalorizarte o a humillarte, a chantajearte emocionalmente, a amenazarte con hacerte daño a ti o a tus hijos, a manipularte en tus dinámicas sociales, a controlar tu dinero, el que te ofenda en público o en privado, agresiones físicas o sexuales, entre otras.